Un día
yo me iré
con los últimos pájaros
por las últimas ramas
de la tarde
y ya no seré nada.
Un día yo me iré
con la primera estrella
de la tarde
y ya no seré nadie.
Un día yo me iré
por el último viento
de la tarde
y tan sólo habré sido
un sollozo del aire.
Con los últimos pájaros
por las últimas ramas
con la primera estrella
por él último viento
un día yo me iré
por la tarde
y gritará el silencio
de la calle.
Un día yo me iré
por la tarde
dejando un hueco
para otro en el paisaje.